sábado, 13 de julio de 2013

Noveno día - Vamos a Ilha Grande y descubro que nuestra favela no está pacificada!

Hoy ha sido un día estupendo, de esos días que sabes que todo en la vida tiene un por qué y que todas las personas que te encuentras en tu vida aparecen por alguna razón, por más simple que parezca. Hemos ido a correr por la manhana (estoy en un ordenador portugués y no tengo letra enhe) y después nos hemos preparado las mochilas porque este fin de semana lo vamos a pasar en Ilha Grande :)

Preparadas para el viaje :)

Hemos cogido un bus hasta la rodoviária (algo así como la terminal de autobús). Hemos salido más tarde de lo que debíamos así que hemos ido perdiendo todos los transportes que teníamos que coger (primer bus, segundo autocar, y tercer barco). Por suerte, hemos ido cogiendo los siguientes disponibles y, aunque hemos tardado más de lo previsto, hemos llegado bien.


El pueblo desde donde hemos cogido el bus era precioso. El típico pueblito costero con barquitos de madera y, por si fuera poco, rodeado de montanhas súper verdes. Desde Río, se tarda unas 2 horas en llegar hasta aquí. Ahora mismo no recuerdo el nombre, en unos días lo actualizaré. - El nombre es Conceiçao de Jacarei -. En barco, se tarda una hora en llegar hasta Ilha Grande (que es, como su nombre indica, una isla muy grande). Cuando hemos llegado, la luz se había ido en toda la isla (no está muy poblada, sólo un par de pueblos), y estaba todo apagado, excepto la luz de velas que habían puesto en casas y restaurantes, además de la luz de la luna y las estrellas. Ha sido increíble; se veía el cielo más bonito que he visto en mi vida.



Puerto de Conceiáo de Jacarei
Hemos ido andando a oscuras a buscar el hostel donde nos quedábamos (Che lagarto, de la misma cadena que el de Copacabana). En la recepción he conocido a un grupo de chicos irlandeses (mi padre es irlandés), y en la habitación a un senhor llamado John, irlandés también, y que nació en un pueblo muy cercano a donde nació mi padre en Irlanda (un pueblo muuuuuy pequenho, o sea que es muuuucha casualidad!!). He estado hablando con él un buen rato. Es profesor de una universidad en Irlanda y ha ejercido durante 13 anhos. Un día, decidió tomarse un anho sabático y viajar por el mundo, y aquí está acabando su viaje. Me ha estado explicado todo lo que ha aprendido durante su viaje, cuánto miedo ha perdido a la vida, ha sido muy interesante! Le he pedido que nos hiciéramos una foto para ensenhársela a mi padre, y me ha dicho que ok, y que además me hacía un retrato! Ya subiré fotos :)

John, el irlandés, haciéndome un retrato personalizado!! 
Después de mi retrato,  hemos ido a cenar en el pueblecito, a oscuras de nuevo. Hay muy buen ambiente. Da gusto ir andando tranquilamente por la naturaleza, sin miedo de encontrarte a un tío armado en la siguiente esquina. Esto es el paraíso! :)

Cena en un restaurante de comida típica de la región de Minas Gerais 

Lo más destacable del día es que me he enterado de que nuestra favela NO está pacificada. Hasta ahora, todo el mundo me había dicho que sí lo estaba porque puede entrar la policía. Yo me preguntaba: si la policía puede entrar, para qué se arman los bandidos? Por qué hay badenes por toda la favela y troncos de árbol impidiendo que los coches circulen? Pues bien, nos ha acompanhado a Ilha Grande una exvoluntaria australiana, y me ha dicho que nada de eso. Que la favela no está pacificada, que en todo caso es más pacífica que otras porque no hay muertos todos los días y se respira cierta tranqulidad. Bueno,yo sigo diciendo lo mismo: en la favela me siento segura. Sólo hay que saber por dónde y cómo moverse. 

Buenas noches :) (subiré fotos de este post cuando lleguemos el domingo!)